Servicio Social… qué?!

Un pequeño defecto que tengo es qué, cuando me hablan tiendo a quedarme callado pensando lo que voy a decir, porque cuando contesto rápido es un juego de azar de un 50% de hacerlo bien a un 50% en regarla. Mientras pienso el porcentaje de acierto aumenta, aunque cabe la posibilidad de fracaso por una o dos cosas que no tomo en cuenta.

Hoy ha venido una señora a preguntar “¿Se puede hacer servicio social con usted?” Me quede pensando y la señora se empezó a desesperar; ¿servicio social? posiblemente quiera que le ayude a hacer algo gratis, como puede ser imprimir folletos o que dé clases de computación para alguna beneficencia ó quizá ella quiera venir a ayudarnos y así aprender algo de computación.

Me gusta llamar a ese tipo de pensamiento como “predictivo”, se puede uno imaginar el futuro, je. En fin, la señora se empezó a desesperar porque para ella era un Sí o un No; si yo decía que sí, que viniera a hacer el servicio social con nosotros, significaba abrir las puertas de mi casa a un desconocido y exponer miles de pesos en equipo y accesorios. si decía que no, perdía la oportunidad de tener un alumno y ofrecer un servicio a la comunidad, porque aunque he “bautizado” tecnológicamente a muchas personas, he tenido muy pocos alumnos.

Al final dije que no por lo desesperada que lucia esta persona, si así se pone contra mi, ¿cómo será contra un cliente y bajo presión?. No es que sea un pan de dios, de hecho muchos me desesperan y he perdido varios malos clientes por mi carácter, pero es muy diferente a que como dueño yo cometa errores a tolerar que otra persona me los pierda.

Debo agregar que me tomo por sorpresa que viniera a pedírmelo, hay otros locales con internet alrededor… quizá fui su última opción. Debería estar preparado para poder ofrecer un servicio así.